La nueva infraestructura educativa surge de un proyecto de reubicación que viene dentro de lo contemplado en un pronunciamiento de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), donde establecía que se debía realizar un proceso de concertación con las comunidades del área de influencia directa y beneficiarios del servicio educativo, para definir el predio donde se construiría la escuela.

Después de un largo proceso de concertación con la comunidad la compañía petrolera Perenco logró un común acuerdo para trasladar la institución educativa, seguidamente realizó los estudios y diseños para la construcción de la nueva infraestructura con acompañamiento de las Secretarías de Obras, Educación y Planeación del municipio.

La obra tuvo una inversión aproximada de 1.400 millones de pesos que se reflejan en: un aula de preescolar, una biblioteca, una sala de sistemas, dos aulas de primaria, una batería de baños para niños, una batería de baño para damas, una batería de baños para caballeros, un baño para personas con movilidad reducida, una batería de baños para empleados administrativos, un cuarto de máquinas, dos mesones comedor con bancas en concreto, una cocina, un depósito, una alacena, una edificación de cancha deportiva con graderías y cubierta tipo DNP, cerramiento en malla eslabonada 3 hilos por el perímetro del lote, zonas comunes, vía de acceso, campo de infiltración y redes eléctricas perimetrales.

La comunidad del sector agradeció la obra, pero manifestaron la problemática de la escasez en el suministro de agua, teniendo en cuenta que el pozo profundo no tiene la capacidad adecuada para cubrir la demanda del sector.