En épocas de COVID-19 se hizo muy popular la palabra reinventarse, sin embargo, es algo que no es fácil y menos para una pequeña empresa, pero cuando se hacen las cosas de corazón no solo se puede seguir adelante sino incluso se puede ayudar a quienes más lo necesitan.

Es el caso de Creaciones Karens, una micro empresa familiar de dos Yopaleñas conformada por mamá e hija de tan sólo 18, quienes decidieron emprender su proyecto independiente desde hace 4 años en el negocio y venta de ropa, zapatillas y diferentes accesorios; pero como a todos en el mundo la pandemia las tomó por sorpresa.

Luego de permanecer secantes por disposiciones de decretos y demás directrices del gobierno nacional y tras ver que muchas personas especialmente de escasos recursos no podían acceder a los tapabocas, decidieron poner su conocimiento en el sector textil al servicio de los más necesitadas y crearon su propia línea de tapabocas, pero lo más importante fue que decidieron donar parte de su producción a las personas que querían usar tapabocas, pero que no contaban con el recurso para comprarlos.

Con su vocación de servicio y responsabilidad empresarial, han donado más de 400 tapabocas que ellas mismas han fabricado utilizando alta calidad en su confección, con doble tela para mayor protección y diseños que se adecuan tanto para niños como para adultos. La entrega de este producto indispensable para contener la pandemia la realizan ellas mismas puerta a puerta en sectores como: Hospital Regional de la Orinoquia, Llano lindo, La bendición, 15 de octubre, Villa David, Berlín, Torres del silencio, Urbanización San Marcos, Villa flor 2 y La invasión mi Nueva Esperanza, personas que se han beneficiado con este pequeño detalle como ellas lo denominan.

Para quienes deseen apoyar estas dos empresarias, la manera más sencilla es comprar sus productos, lo pueden hacer a través del celular 3133668770 y las encuentran en Facebook como creaciones Karens, despachan ropa, zapatillas, accesorios y ahora tapabocas para todo el departamento.

Esperamos que estas iniciativas inspiren a grandes empresarios que facturan millones de pesos, pero que a la hora de ayudar o ponerse al servicio de los demás les cuesta.