Cuando el mundo está girando en procura de la conservación de los bosques como ecosistemas de vida, en varias Veredas del Municipio de Labranzagrande en Boyacá, según denuncian diferentes comunidades, se ha venido realizando tala indiscriminada de bosques nativos, acabando con el manto verde que le da vida al nacimiento del Río Chiquito, una de los principales afluentes que alimenta el Río Cravo sur, que abastece de agua a la mayoría de Yopaleños.

Pese a que según informa la comunidad, esta actividad ilegal es de conocimiento tanto de parte de la alcaldesa Paola Peña, como de la misma Policía y de Corporinoquia, no se ha hecho nada para evitar que sigan acabando con estos bosques convirtiendo el paisaje en simples zonas llenas de maleza.

Entre las veredas que mas a sufrido la tala se encuentra la Vereda La Lorena y Óchica, las comunidades hacen un fuerte llamado tanto a la alcaldesa de Labranzagrande Paola Peña, como a la policía y sobre todo a Corporinoquia, para que haga vigilancia y control, porque no es posible que acaben con los ecosistemas nativos sin que ninguna autoridad asuma su papel, pese a que al parecer tienen conocimiento de lo que pasa.

Según se informa están saliendo entre uno y dos camiones carpados semanales llenos de madera hacia Sogamoso, sin ninguna restricción y sin permiso alguno por parte de ninguna autoridad.