En un trabajo conjunto, el Ejército Nacional y la Fuerza Aérea Colombiana llevaron bienestar, salud y donaciones a más de 2 mil habitantes de las comunidades étnicas de este departamento.

Durante dos días, jóvenes, niños y adultos mayores de las comunidades Sicuani, Piapoco y población del casco urbano de la región se beneficiaron de una jornada de apoyo al desarrollo gracias a la unión armónica de esfuerzos entre soldados, aviadores y la administración pública, cabe destacar que la región aún tiene problemas de conectividad y las redes de comunicación son precarias.

La actividad fue apoyada además por 35 voluntarios de la Fundación Manos Pintadas de Azul, quienes viajaron durante dos horas desde Bogotá en un vuelo de la Fuerza Aérea Colombiana para realizar más de mil atenciones médicas en las especialidades de fonoaudiología, nutrición, odontología, optometría, pediatría, ginecobstetricia, ginecología, medicina interna y medicina general; y suministraron los medicamentos formulados sin ningún costo. Además, personal de la salud del Hospital San Juan de Dios, brindó el esquema de vacunación básico para los niños y mujeres.

Durante el trascurso de la brigada de salud, el Ejército Nacional y la Fuerza Aérea Colombiana realizaron actividades lúdicas y recreativas donde los niños conocieron al Soldado Lancita y al Capitán Paz.

Adicionalmente, la Corporación Minuto de Dios entregó 1.500 prendas de vestir y la Asociación Nacional de Acción Social del Ejército Nacional entregó más de 500 kits escolares, 1.000 prendas de vestir y pares de zapatos, así como 500 herramientas lúdicas para los niños y jóvenes; y Totto hizo entrega de morrales escolares con el fin de brindar bienestar y apoyo a toda la comunidad de estas regiones apartadas de nuestro país.

Cabe destacar, que esta es la primera vez que las Fuerzas Militares llegan hasta una región tan apartada del Vichada con las capacidades de Acción Integral y que gracias a este importante esfuerzo se beneficiaron más de 2 mil personas de poblaciones étnicas ubicadas a más de 18 horas de la capital del país. De esta forma, las Fuerzas Militares siguen llegando a toda Colombia progreso y bienestar a las comunidades más apartadas de la Nación.