Hay preocupación en las autoridades sanitarias del Meta en razón a que las comunidades indígenas por ahora se niegan a recibir la vacuna contra el COVID-19, lo que los dejaría expuestos al virus.

Por sus creencias ancestrales y costumbres étnicas los gobernadores y capitanes de los resguardos se negaron a aceptar la inmunización en sus territorios, sin embargo, se adelantan acercamientos con estas comunidades para que cambien de opinión y se dejen vacunar.

Entre tanto desde la gobernación del Meta se creó una subcomisión de la mesa permanente de concertación a nivel nacional, para analizar si en el momento que las comunidades accedan a vacunarse, puedan recibir la vacunación desde las personas mayores de 18 años.