Según resultados del monitoreo del mes de julio, aunque la situación mejoró para el 84% de los municipios en sus cabeceras municipales, existe un riesgo latente en por lo menos siete municipios del departamento cuyos resultados determinaron que no contaban con agua apta para el consumo humano. En cumplimiento de lo establecido en la Resolución 2115 de 2007, la Secretaría Departamental de Salud, da a conocer a la comunidad del departamento los resultados del monitoreo al Índice de Riesgo de la Calidad de Agua (IRCA) para las áreas rurales de Casanare, en los que se tuvo en cuenta información recolectada durante junio y julio.

La clasificación de veredas por municipio, según el nivel de riesgo, es la siguiente: Hato Corozal, Inviable sanitariamente: Enramadas, Rosa Blanca, Chire y Chapas. Riesgo Medio: Santa Rita, Paz de Ariporo Inviable Sanitariamente: La Palma, Riesgo Alto: Rincón Hondo y La Gauada, Riesgo Medio: Montañas del Totumo así continua la clasificación para otras sectores de municipios como: Pore, Nunchía, San Luis de Palenque, Orocué, Maní, Tauramena, Monterrey y Villanueva.

Por otro lado, para el caso específico de las cabeceras municipales, el IRCA correspondiente al séptimo mes del año destaca un resultado favorable para 16 de los 19 municipios del departamento, dejando solo a tres (3) de ellos en la categoría de riesgo medio, correspondientes a los municipios de Hato Corozal, Támara y Sabanalarga.

Pilar Perilla, referente de la Dimensión de Salud Ambiental de la Dirección de Salud Pública Departamental, indicó que los niveles de riesgo en la calidad del agua se presentan en la mayoría de los casos por falencias en la operación y mantenimiento de las Plantas de Tratamiento Agua Potable y a la variación del comportamiento climático en los municipios.

Finalmente señaló que, desde la Secretaría Departamental de Salud se invita a la comunidad a tomar un papel activo en la prevención de situaciones de riesgo por el consumo de agua sin los respectivos niveles de salubridad, hirviendo durante varios minutos el recurso hídrico con fines de consumo y fortaleciendo los protocolos de manejo del líquido, antes, durante y después de su uso.