Por: Leydi Fonseca.

La automedicación es el acto de comprar y tomar medicamentos por iniciativa propia sin una prescripción médica. En Colombia es una situación que genera preocupación debido a que automedicarse puede traer consecuencias perjudiciales para la salud. Según datos del INVIMA hay alrededor de 226 medicamentos de venta libre en el país, aquellos que facilitan su uso y compra indiscriminada por parte de las personas.

¿Pero de donde nace esta costumbre? ¿Por qué las personas se automedican? Muchas de las historias frecuentes son por ejemplo “un vecino, amigo, familiar, etc me recomendó un medicamento porque esa persona lo usó y le funcionó”, “una vez el doctor me lo ordenó y como me funcionó lo volví a comprar”, “ví un comercial de televisión y decía que era muy bueno” ó quienes prefieren ir en primera medida a una droguería que a un centro asistencial.

El problema de asistir con mayor frecuencia a una droguería que al médico, se centra en qué no se debe olvidar que la droguería es un negocio, y por tanto en muchas ocasiones le pueden ordenar más medicamentos de los que usted necesita o le sugieren medicamentos con principios activos más fuertes y potentes en los que muchas veces se desconocen las contraindicaciones en el uso de estos medicamentos como es en pacientes con hipertensión arterial, diabetes, enfermedad renal crónica, que pueden contribuir a agravar estas situaciones.

Los medicamentos con los que más frecuentemente se automedican son aquellos para aliviar el dolor, es decir los analgésicos. Debe tener en cuenta que todos los medicamentos tienen efectos secundarios, unos más que otros y pueden ir desde leves a situaciones más complicadas. Igualmente, no todas las personas presentan estos efectos secundarios. Por esto la importancia de que sea un médico el que se los prescriba ya que es la persona capacitada y tiene todo el conocimiento sobre la farmacología, además que cada paciente se debe individualizar, por lo tanto no se puede asegurar que si a un amigo le funcionó un medicamento a usted también le funcione.

Estados Unidos se enfrenta a una gran problemática por el uso indiscriminado de opioides, fármacos que son analgésicos, se pueden usar en casos de dolor severo como pacientes con cáncer, entre otros, por lo tanto no están indicados por ejemplo para un leve dolor de cabeza que pueda generar una gripa. El problema de esta situación es que dentro de los efectos adversos de los opioides se encuentra la dependencia y muchas personas se pueden volver adictos a estos medicamentos porque no se usan de la manera correcta.

Otros medicamentos que presentan un uso elevado e indiscriminado por la automedicación son los antibióticos. Y en este caso debe tener en cuenta que estos fármacos funcionan únicamente ante infecciones bacterianas, por eso cuando un paciente tiene gripa o rinofaringitis virales, es decir causadas por virus no se prescriben estos medicamentos porque esas enfermedades muy frecuentes no son causadas por bacterias.

El problema es tan grave que la Organización Mundial de la Salud ha realizado numerosas campañas para disminuir el uso indiscriminado de antibióticos, porque cuando se usan cuando no son necesarios generan resistencia bacteriana, es decir las bacterias se vuelven resistentes al fármaco y éste pierde su acción, lo que obliga a utilizar antibióticos de mayor complejidad.

Otras situaciones que se pueden presentar por automedicarse son eventos tóxicos, alérgicos y enmascaramiento de procesos clínicos graves y consecuentemente retraso en el diagnóstico y tratamiento. Los adultos mayores y los niños son los más vulnerables a estas situaciones.

Por eso no tome medicamentos si no son ordenados por un médico. Cuide su salud, recuerde que es el tesoro más valioso que puede tener.